viernes, 16 de julio de 2010

Parque Celestino Muti dia 16 de julio

Comienzo dando las gracias al Director del Parque del Alamillo, Adolfo Fernández Palomares, al que solicite ayuda para este tema del parque de Celestino Mutis, hoy me ha llamado para confirmarme que le han asegurado en Parques y Jardines que se llevaría a efecto el riego, en tanto se soluciona el tema de la bomba de riego; con un camión. Pienso que esta decisión la debieron de tomar antes las personas que entendemos están al frente del cuidado de nuestro patrimonio, en este caso vegetal de un parque, estamos hablando de seres vivos que una vez mueren son irrecuperables, y se tarda años en conseguir ejemplares como los perdidos. Aparte de la pedida económica que supone.

Cito unas palabras de Julio Martínez Torres en la presentación de un libro sobre "Árboles Ornamentales en Navarra" en que dice "Las reminiscencias agrícolas se reencarnan en ciudades y plazas, sobre todo cuando los Ayuntamientos y jardineros sienten el árbol como un elemento vivo de la comunidad urbana y urbanizada, porque nace, crece y muere. Como cualquier otro ciudadano. Los árboles también están en el registro de la historia urbanística y personal de los habitantes de pueblos, villas y ciudades navarras. Cuando se talaron los olmos por la grafiosis, algunas calles - y en concreto el parque de la Taconera- quedaron huérfanos de sombra y de relleno vegetal." " Los responsables de urbanismo no debieran aprobar una calle sin árboles, una plaza sin vegetación y un barrio sin parque" "Una calle con árboles impide ver el cemento porque lo vegetaliza" también aconseja dar a conocer las especies a los ciudadanos como forma de que estos las amen. Creo haber comprobado que el objetivo allí está conseguido, tuve la suerte de hablar en el Parque que se cita con varias personas y se sienten orgullosas de sus árboles, y ni que decir los jardineros que cuidan el parque.

Lo siento, esto sucede poco en Sevilla, pero, ¡que se puede esperar! si el Ayuntamiento ha llevado a cabo un sistema de acoso y derribo contra ellos dejando calles despobladas y otras plantadas con estaquitas con dos hojas en la punta, que luchan por sobrevivir y darán sombra dentro de dos generaciones.

Esperemos que el riego llegue a tiempo, que los árboles estén censados como los ciudadanos y se pida responsabilidades a quien corresponda ante cualquier incidencia de este tipo, ¡no mas negligencias!

Y que la Delegada de parques y jardines deje los discursos retoricos y defienda y cuide los árboles y los parques y jardines de esta ciudad, para que los ciudadanos cuando viajamos no sintamos envidia de otras ciudades  


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