sábado, 30 de diciembre de 2017

Paseando por Triana


Hay muchas zonas en Sevilla que guardan un encanto natural, cada vez que uno pasa por ellas encuentra algo diferente que poder admirar, una de estas zonas es el Barrio de Triana 

Esta vez encontré en la plaza de Martín de Porres, entrada a la calle San Jacinto, un puesto en el que colocados de forma decorativa se ofrecía frutos y hierbas aromáticas, madroños, bellotas, laurel, tomillo y un etc. todo además muy navideño

En medio lucia un bello botijo artesanal y un bello muñeco con ojos expresivos que graciosamente obedecía a la voz del dueño del puesto que muy amablemente me permitió fotografiarlos 


Le decía a su muñeco “mira a la señora que te va a dar una propina”, manera diplomática  de solicitar una ayuda por supuesto y que creo merecía, seguramente para conseguir la mercancía que ofrecía había pasado muchas horas de frio, y en este momento enrollado en su bufanda y cubierto con su sombrero me ofreció amabilidad 


Al poco tiempo y ya de regreso pude ver como recogía el puesto, tres o cuatro policías locales le obligaban a retirarlo de un sitio que a mi entender no molestaba a nadie y no pude dejar de pensar ¿Somos todos iguales?  

Solo hay que irse a algunas zonas del centro de Sevilla, la Calle Sierpes, calle Velázquez, en las que un grupo considerable de manteros tienen expuestas sus mercancías dificultando el tránsito de las personas, la policía lo sabe, es mas tanto a la entrada como a la salida de estas calles hay vigilancia, pero con ellos no se atreven, pagan estos individuos, algún impuesto, deduzco que no pues siempre andan vigilantes para cuando la policía se digna pasar quitarse velozmente de enmedio
  
Incluso cuando ser permiten ponerse en la puerta de comercios que ofrecen la misma mercancía y que están acribillados a impuestos 

Y no digamos nada de todos los que invaden las aceras impidiendo el paso normal de los ciudadanos, podemos enumera: veladores, personas de pie bebiendo en las entradas y ventanas de los bares. Tablillas con anuncios en mitad del acerado, mercancías expuestos en las puertas de algunos comercios y un largo etc. Que hace cada vez mas dificultoso andar por la calle sobre todo se si va acompañado

Y se dedica un puñado de policías para erradicar algo que incluso resulta agradable a quienes pasan 

No, no somos todos iguales

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